Nick Drake: la fama tras la muerte

Lemmy Kilmister, el popular bajista y cantante de la banda Motörhead, reflexionaba en su autobiografía sobre qué sería de él cuando estuviera muerto. Lemmy, fiel a su dialecto sincero y directo, dijo que probablemente vendiera más discos cuando muriera que en vida. Esta reflexión del fallecido cantante inglés, se podría aplicar a muchos otros artistas. Uno de ellos es Nick Drake. Apartado por la crítica y el público, inclusive en algunos momentos por las discográficas, el cantautor se volvió mucho más popular cuando la guadaña le atrapó en su sueño eterno.

El comienzo del camino

Alto, de complexión delgada, con un aire a Jim Morrison, tímido, con cierta tristeza en los ojos y con una frecuencia escasa a la hora de tocar frente al público o conceder entrevistas. Así era un Nick Drake que guardaba en su figura el alma y la presencia de un cantautor corriente, siempre con la guitarra colgada al hombro y en constante producción de letras. Pero más allá de las simples apariencias, Nick chocaba mucho con el estereotipo del típico cantautor inglés.

Música Nick Drake
El cantautor Nick Drake.|| Fuente: youtube.com

Era una persona complicada, atrapada en una espiral donde casi todo se reducía a escribir, leer, escuchar música y, por ende, influenciarse de escritores, poetas y otros cantantes. Su vida giraba en torno a la música y, desde pequeño, empujado por sus padres, empezó a tocar el piano, el clarinete y el saxofón.

Habiendo comenzado su carrera universitaria en filología inglesa, Nick se topó, de repente, con la oportunidad de firmar por una discográfica llamada Island Records.

Su pronta carrera musical se debió a Ashley Hutchings, el bajista de la banda Fairport Convention, quien consiguió el contrato con la discográfica. Con una rapidez pasmosa, Nick Drake empezó a grabar el que sería su primer álbum Five Leaves Left.

Los álbumes

«Time Has Told Me», «River Man» o la célebre «Fruit Tree» forman parte de un repertorio poético y con frases célebres para el recuerdo dentro de la discografía de Nick Drake. El carácter reservado y la certeza de mantener su obra como él había pensado llevaron tras de sí distintas discusiones en la fase de producción.

Sin querer abandonar su arte, y con la idea clara de que su obra se haría famosa tras su muerte, el cantautor abandonó sus estudios universitarios y se lanzó de lleno a su carrera musical, a pesar de que su debut había resultado pobre en ventas. Su mudanza a Londres, sin una casa donde vivir, estuvo cargada de momentos de miseria en los que no sabía dónde a dirigirse para tener un lugar en el que llevar una vida. La casa de su hermana, sofás de amigos o incluso la calle acogieron en su seno al solitario Nick. Pasados unos cuantos meses, y gracias a su productor Joe Boyd, pudo empezar a vivir en unas mejores condiciones.

Antes de la grabación de su segundo LP, Bryter Layter, Nick Drake resolvió que iba a realizar escasos conciertos a lo largo de su carrera. Esta decisión fue tomada por el cantautor a raíz de un concierto para la BBC, donde al público no le entusiasmó su música. Al acabar la actuación optó por ser más reticente. En 1970 se lanzó su segundo álbum, Bryter Layter.

Este disco, más cercano al jazz que su predecesor, tenía un aire más comercial. Alejado del sonido acústico del primer álbum, Bryter Layter añadía pistas de batería y bajo. Parecía que las cosas esta vez sí iban a salir según lo esperado, pero las ventas por debajo de las 3.000 unidades se encargaron de dinamitar toda esperanza en el propio Drake. Si eso no era suficiente para sumirle en una depresión, la venta de Island Records a Witchseasons y la marcha de Joe Boyd, su mentor, no hicieron más que agravar la situación.

Música cantautor Nick Drake
El cantautor británico Nick Drake. || Fuente: youtube.com

Drake intentó realizar algún concierto. Una noche en el Ewell Technical College de Surrey, Nick estaba tocando «Fruit Tree» y decidió abandonar el escenario en la mitad de la canción, frustrado, hundido en el pesimismo. El consumo abundante de cannabis y, en menor medida, de otras drogas, también se habían convertido en costumbre para el artista. A pesar de visitar a un psiquiatra, no terminaba de sentir que su vida fuera a flote.

En un principio, ni Drake ni Island Records querían un nuevo álbum del artista, pero finalmente Nick se acercó a su nuevo propietario y firmaron un contrato para llevar a cabo el que sería su último álbum, Pink Moon. Grabado en sesiones de dos días, empezadas a medianoche, el álbum fue realizado a una velocidad pasmosa. Nick Drake se acercó a Island Records, y sin decir ni una palabra, dejó la cinta máster en la repisa de la recepción. En ese momento Drake daba vueltas a la idea de abandonar la música y buscarse otra vida, una vida que tal vez levantara su ánimo destruido y hecho harapos.

Me recordarán cuando me haya ido

La depresión avanzaba con firmeza en la vida de Nick Drake. Cada vez estaba más distante de su familia, de sus amigos, de todo el mundo. Abandonándose incluso a sí mismo con la apariencia de un mendigo, apenas recibía 20 libras por su trabajo. A veces llegaba a casa de sus amigos, no decía ni una palabra, pasaba tres noches allí y luego se largaba hasta que, sin previo aviso, volvía a aparecer. Se barajó la posibilidad de un cuarto álbum, dado que el propio Nick quería volver, pero ese proyecto nunca llegó. Su estado vocal era aterrador, y no podía siquiera tocar la guitarra y cantar al mismo tiempo.

En la mañana del 25 de noviembre de 1974, sito en casa de sus padres, Nick Drake murió por una sobredosis de amitriptilina, un antidepresivo que tomaba con frecuencia para que le ayudara a dormir. A su lado tan solo se encontró una carta para una muchacha de la que Drake estaba enamorado, Sophia Ryde. Tras su muerte, declarada como suicidio, Nick empezó a ganar algo de fama, y en los 70 y 80 se volvió una persona conocida.

Como predijo el propio Nick Drake en su canción «Fruit Tree», «nadie conoce el árbol de la fruta, salvo la lluvia y el viento, pero todo el mundo se levantará y lo mirará cuando se haya ido». Un ejemplo más del triunfo después de la muerte.

Juanma García

Nacido en tierras madrileñas allá por 1992. Estudiante de marketing, amante del periodismo y apasionado de la música en muchos de sus géneros.