Rafael Lechowski
Rafael Lechowski en una entrevista. || parnaso2punto0.aragon.es

Rafael Lechowski, transformando el dolor en arte

Hay un momento que ocurre en la carrera de todo artista o grupo musical. Un directo, una recopilación o un álbum en el que las reinterpretaciones de temas escritos anteriormente salen a la luz con una vuelta de tuerca. Ocurre que en ocasiones los artistas, con dichas interpretaciones alternativas, destrozan la canción favorita de un oyente o, por qué no, la mejoran con creces. No son pocos los grupos e individuos que, gracias a un directo o una reinterpretación, han visto mejoradas sus canciones. Rafael Lechowski forma parte de ese grupo de personas.

Rafael Lechowski
Rafael Lechowski en una entrevista. || parnaso2punto0.aragon.es

La reinterpretación de su obra

De ascendencia polaca pero prácticamente criado en España, Rafael Lechowski se empezó a hacer conocido en el mundo del rap español con el grupo maño Flowklorikos. Formando parte del grupo, Lechowski empieza a palpar los entresijos de su obra, conociendo cómo debía moverse en el mundo para que su obra fuera reconocida.

Aunque en 2007 lanzara el álbum Donde duele inspira, en el que da un enfoque diferente a su manera de relatar los sentimientos, a Lechowski le faltaba algo para terminar de explotar. Ese algo era una base rítmica de jazz. En el momento en que contactó con la banda valenciana Glaç y grabó la nueva versión del álbum, Rafael empezó a estar en boca de toda la escena más que nunca.

Todo se debe a una extraña relación con la perfección, la búsqueda del estilo ideal que le encaje a las letras. En los tiempos donde Lechowski empezaba a encajar frases en canciones con Flowklorikos, aquellas letras estaban más dedicadas a una población urbana con ligeros toques cultos, rozando lo filosófico.

En el trayecto que va desde los primeros temas hasta la etapa donde el autor forma Donde duele inspira, el estilo de escritura de Lechowski se vuelve una mezcla entre lenguaje poético y urbano que no termina de sentirse cómodo con las bases que se le ofrece al disco. Es por eso que, aunque el disco ya poseía ligeros toques de jazz, Rafael Lechowski decide lanzarse a la piscina y amplificar aquel sonido para convertirlo en el 50% del disco, junto con el otro 50% que son las letras.

El dolor como fuente de inspiración

Aunque el sonido había tomado un rumbo tremendamente distinto al que tenía el álbum original de Donde duele inspira, las letras también sufrieron cambios reseñables que fueron palpados enseguida por los fans más incondicionales. Si en las letras de Flowklorikos se empleaba un lenguaje más enfocado al rap urbano, aquí se veían resquicios de ese estilo acompañado de un lenguaje más enfocado a la poesía. Es en este disco donde se ve a un Lechowski frágil, filosófico, lleno de preguntas y en búsqueda constante de las respuestas.

Cuando el disco arranca con “La nada eterna” se intuye un álbum muy personal. Rafael se desnuda con sus letras y muestra la profundidad de su alma y de su pensamiento desde los primeros compases. “Me hacéis sentir incomprendido, pero os comprendo”.

En cada canción evoca sentimientos dispares. El amor, la muerte, la esperanza, la felicidad o el pesimismo forman parte de un todo melancólico, soberbio y que siempre se mantiene emotivo. Más aún si las letras van acompañadas de una banda con un estilo musical que juega con los tiempos, rápidos y lentos, y con instrumentos como el piano o el saxo.

Incluso se atreve a escribir sobre su relación con la escritura en “Soy loco por ti”, donde se muestra en una relación que oscila entre el desamor y la reconciliación por no poder vivir el uno sin el otro. Un alegato perfecto a la poesía, a la pasión que uno mismo lleva por dentro. En definitiva, a su forma de vivir.

En el remozado Donde duele inspira está conformado por una música que aporta una fuerza emotiva especial a las letras de un gran poeta como es Lechowski. Su tinta, taciturna, repleta de llantos ahogados, parece conformar con la obra un todo de aquello que nos puede ofrecer el dolor, tanto de forma positiva como negativa. En ese círculo de dolor se sincera diciendo que quisiera tener libertad y felicidad, que quisiera vivir con lo mínimo en el terreno material. Añade que, a pesar de todo, siempre se siente orgulloso de ser él, aunque esté rodeado de infelicidad en algunos momentos.

No se alcanza a comprender totalmente si es un disco nacido de la tristeza que, mejorado en opinión del propio Rafa con los elementos del jazz, termina por recorrer diferentes senderos con un sólo objetivo claro: el yo, la persona, en este caso el artista.

Rafael Lechowski Larga Brevedad
Rafael Lechowski en la promoción de su libro Larga Brevedad. || hhgroups.com

Lechowski, poeta solitario

Cuando uno se adentra tanto en la obra musical como poética de Rafael Lechowski, se adentra en un laberinto donde convergen grandes monstruos que son encontrados en la vida moderna. En su obra se consigue invitar al lector, al oyente, al consumidor, a una espiral de palabras que conforman un templo de sabiduría erigido por un asceta que vive en casi total soledad.

Apartado del humo de las fábricas, el ruido de los motores y la intranquilidad de las ciudades, Lechowski prefiere vivir en su paraíso natural mientras la musa de la inspiración le acompaña. Haciendo de una canción la poesía, y de su dolor arte, Lechowski espera paciente para sacar a la luz el que será la primera parte de su nueva obra, Quarcissus: El arte de desamar.